El escritor pamplonés presentó ayer su última obra de relatos literarios
La fascinación del autor por la figura del rey poeta Teobaldo I es el motor del libro
Paula Echeverría. Diario de Noticias (5-06-2013)
La fascinación que desde pequeño ha sentido por la figura del rey poeta Teobaldo I de Navarra (1234-1253) ha sido el motor de la última obra de Mikel Zuza, con la que pretende acercar la historia de la Dinastía de Champaña de una manera amena y actual, para que al lector "le pique la curiosidad" y vaya a conocer más sobre esta parte de la historia de Navarra.
Editado por Pamiela, el Libro de los Teobaldos, que el escritor pamplonés presentó ayer al público en la Feria del Libro, recoge "relatos literarios que usan como fondo la Historia", que aquí se combina con la imaginación literaria y con guiños a la actualidad, en torno a la dinastía de reyes poetas y guerreros que llegó a Navarra en el año 1234: los Teobaldos, que entre otras cosas ordenaron recopilar el celebérrimo Fuero General y fijaron definitivamente en su escudo el emblema de gules, carbunclo cerrado y pomelado de oro que identificó primero al rey, y desde entonces a todo el reino. "Este libro es una deuda que tenía conmigo mismo desde hace muchos años, porque la figura de Teobaldo I es un personaje histórico que siempre me ha gustado, y a veces me ha estado rondando sin yo saberlo", comentó Mikel Zuza, refiriéndose a que cuando era pequeño, su padre le hablaba de una estatua de Teobaldo I que había en la Taconera. "Pero no había manera de encontrar ninguna foto que lo atestiguara... hasta que hace pocos años la encontré, y era cierto, Teobaldo I había tenido una estatua en Pamplona", dijo el escritor sobre este rey poeta que es "el motivo principal" de su libro. "Teobaldo I representa ese eslogan de mayo del 68, de la época hippie, de ser gobernados por poetas. Y mira por dónde, nosotros en el siglo XIII ya lo teníamos. Y a juzgar por lo que dicen las crónicas, fue muy buen rey. No solo fue un gran poeta, alabado hasta por Dante Alighieri, sino que además gobernó bien, y las crónicas llegan a decir que trató igual al pobre que al rico, algo que no se ha dado luego mucho entre los gobernantes...", apuntó Zuza, quien se dio cuenta en una Nochevieja en Pamplona, disfrazado de Teobaldo I, de lo poco que se conoce a este personaje: "Coincidió que el mismo año en que me difracé de este rey navarro (1995) habían estrenado la película Braveheart, y cada vez que entraba en algún bar todos los escoceses caían sobre mí porque pensaban que era el rey de Inglaterra...". En su Libro de los Teobaldos aparecen también Teobaldo II y Enrique I, y el autor imagina la vida que habría llevado el hijo de este último, al que llamaron también Teobaldo y que falleció siendo un bebé al escurrirse de los brazos de su aya y caer desde la torre del castillo de Estella. "He prolongado la vida de ese niño y he imaginado también las vidas de dos de sus descendientes, Teobaldo y Blanca", apunta Mikel Zuza, para quien la prioridad ha sido "huir del tedio, hacer algo ameno y con base histórica. Y si llego a conseguir que los Teobaldos le gusten al lector tanto como a mí, objetivo cumplido".
